¡LEVANTATE Y ANDA! (Juan 5:1-18)
En el antiguo estanque de Betesda en Jerusalén, se hallaba un hombre que había perdido el uso de sus extremidades hacia 38 años. Muy probablemente a nadie le importaba su condición, aquel pobre hombre vivía de la mendicidad, solo e ignorado por muchos. Mas el Hijo de Dios fija su mirada en él, llena de amor y compasión y al instante le sana. Resulta interesante y muy conmovedor, conocer el significado del nombre de aquel pozo: "BETESDA" el cual es una transcripción griega de la voz aramea que significa "Casa de misericordia"
Y aunque él no lo pidió Jesús le dice: ¿QUIERES SER SANO? y en seguida le manda: "LEVANTATE Y ANDA" ¡Que sorpresa y que maravilla de maravillas para aquel pobre inválido! hallarse repentina y completamente sano y fuerte, ante la orden y el poder del Mesías prometido y por tanto tiempo esperado, pero ahora entre nosotros.Por naturaleza, todos somos espiritualmente ciegos, sordos, cojos, paralíticos, leprosos y marchitos a causa del pecado. Pero la provisión plena para nuestra curación fue consumada en la cruz del calvario. ¿Ha sanado Jesús todas tus dolencias? ¿Llevas mucho tiempo afligido por el pecado, el dolor y la soledad? ¿Quieres ser sano?
Debes saber que Jesucristo, el Unigénito Hijo de Dios, tiene sus ojos puestos en ti, su mirada es compasiva y su amor inconmensurable, sabe tu nombre y conoce cada detalle de tu vida, te ama tanto, que ofrendó su preciosa vida por ti. Cristo levanta a nueva vida a los que están muertos en sus pecados y delitos! Tiene el poder para hacerlo. Deja que su voz llegue a lo profundo de tu corazón: "LEVANTATE Y ANDA" te dice el Señor a través de su palabra. Su voz llega a los corazones de aquellos que están muertos e incapacitados por el pecado. Yo era uno de ellos, mas en su misericordia Jesús me encontró y ahora deseo compartir contigo este amor incomparable.¡LEVANTATE Y ANDA! a una nueva vida en Cristo, ¡Jamás volverás a ser el mismo! Dará verdadero significado y propósito a tu vida, su sangre derramada, puede limpiarte de todos tus pecados no importa cuales sean... Tiernamente, te llama hoy el Salvador. Amén.
